jueves, 17 de julio de 2008

El tiempo pasa!!!!

Guauuuu, mil perdones por mi cuelgue, me super perdí de este espacio tan valioso y divertido. La verdad anduve con muchas complicaciones, y por mucho, mucho tiempo, no pude volver a conectarme con uds, amigos. Pero aca estoy de vuelta, dispuesta a contarles detalladamente mis historias sw. Ahora me va a resultar complicado elegir las experiencias que tuvimos para excribirlas aca, porque fueron varias, jajaja. Voy a elegir las más excitantes.
Hoy les voy a contar la historia de lali y ger. Nos conocimos por chat, como con la gran mayoría de parejas con las que estuvimos. Desde el primer momento pintó muy buena onda. Las charlas se basaban en una mezcla justa de erotismo y seducción, muy picantes, muy calientes. Nos encontramos en un bar. Desde el momento que los vimos entrar nos gustaron. Una pareja hermosa, los dos muy atractivos. Conversamos, tomamos algo, nos miramos y como todo estaba en orden, jajaj, decidimos ir a a la casa de ellos. Cuando salimos del bar nos pusimos de acuerdo para intercambiar las parejas desde ese momento, y las chicas nos fuimos cada una con la pareja de la otra. Ger puso en marcha su auto, y cuando estabamos a punto de salir, se acercaron el falco y Lali porque nuestro auto se habia quedado si batería. Ufaaaa!!!! jajaja. Despues de varios intentos para hacerlo arrancar, decidimos ir los cuatro en el auto de los chicos. Yo iba adelante con Ger, y el flaco se acomodó con Lali en la parte de atrás. Apenas habiamos recorrido unas cuadras cuando sentí que ellos ya habían comenzado con los mimos. Yo los miraba por el espejito, y me ratoneaba mucho al verlo al flaco besarse tan apasionadamente con ella. Mmmm, me empecé a mojar sin darme cuenta, jajajaj. Ger también miraba la escena muy caliente, así que decidió detener el auto y avanzarme a mi. Sentí sus labios calientes partirme la boca. Sus manos recorrían mis piernas y mis lolas. Estabamos muy excitados los dos. Los chicos atrás seguían su historia euforicamente. el flaco ya le había bajado la remerita a Lali, y estaba disfrutando de sus hermosas lolas, grandes y duras, ideales. Sus manos recorrían sus piernas, hasta llegar a su ardiente conchita. Estaban enredados en besos y manos. Sin miedo a equivocarme, puedo decirles que nunca antes lo habia visto al flaco tan caliente, y eso que no era nuestra primera vez, jajajaj.
Finalmente, despues de algunas frenaditas en el camino, llegamos a la casa de los chicos. Muy gentilmente nos invitaron unos tragos mas, pero todos estabamos ansiosos por ir al dormitorio. Veníamos ya muy calientes, nuestro sexo explotaba.
Nos desnudamos mutuamente, lenta y gozosamente. Sentía la pija de Ger erecta, jugosa, y sin darle tiempo me bajé a chuparsela. Él me tiró a la cama, me abrió las piernas y empezó a hacerme temblar con su lengua caliente y sedienta. Mmmmm, yo me retorcía de placer.En pocos minutos empecé sentir ese dulce temblor que abarca todo mi cuerpo ante de explotar. Y exploté gozosamente. Al lado el flaco también disfrutaba lamiendole la conchita a Lali, con fuerza, con pasión, con toda sus ganas. Ella gemía y se retorcía, lo agarraba de la cabeza y lo traía hasta su boca, hasta sus tetas y se enredaba en sus piernas. Los cuatro estabamos desesperados de placer. Sentí de pronto el sabroso miembro de Ger penetrarme suavemente. Yo le pedía fuerza, rigor, quería que me la diera con todas sus ganas, y así fue. Mmmmm , poco a poco su ritmo se aceleró y sentí su gran pija cavar en lo más profundo de mi ser. Nuestras bocas se unían en besos desesperados, nuestras lenguas se entremezclaban sabrosamente. Miré a Lali y al flaco, y vi que ellos también estaban cogiéndose. El flaco la había puesto de cuatro y le estaba dando con todas sus fuerzas. Ella gritaba, le pedía más.La aacostó en la cama y la volvió a coger, hasta que lo vi explotar también de placer. Sus cara reflejaban un placer desenfrenado. Ger también había terminado después de cogerme con todas sus ganas y potencia. LA verdad los cuatro habíamos llegado a nuestro punto máximo de placer.
Volvimos a casa en llamas. Seguimos cogiendo deseperadamente. Nos desperatamos al otro día y seguimos, más y más. Fue una experiencia alucinante, altamente caliente, que nos llenó de emoción y erotismo.
Nos mantuvimos en contacto, tan en contacto, que poco tiempo después, la hisotoria se repitió, esta vez con algunos condimentos extras.